Vida en la Conchinchina: Sobre el autor

Saludos

Creo qué tenía seis años, cuando a mi tío Víctor le regalaron sus Majestades los Reyes Magos de Oriente un globo terráqueo, la intención de aquel regalo fue para iniciarle un poco en geografía y no sé si causo el resultado que la realeza esperaba, pero en cambio, a mí hizo ver que no solo existía Vallecas o Madrid, la ciudad que me vio nacer y crecer, ¡había mucho más mundo, inexplorado por aquella pequeña mente!

Pasaban los años, y aquel niño crecía con ello sus ganas de ver el mundo, aquello tan grande y tan lejano, por entonces el solo conocía Villajoyosa y Las Huertas de Cansa (una pequeña pedanía de Cáceres) en la que no me mal interpretéis, me siento orgulloso de mis vacaciones de niño y amo mi pueblo, pero en aquella época, aquello me parecía pequeño.

No contento años después con que me mandasen los veranos a Dublín, yo seguía notando la falta de querer más, fue cuando cumplí los 18 años ( y tuve mi primer trabajo ), que me marche con un amigo de inter rail, una de las mejores experiencias que he tenido en mi vida. No tardaría en volver a repetir esa fantástica aventura y seguir conociendo Europa.

Pasaban los años, seguía escapándome por Europa fugaces fines de semana y algún que otro día más. Entonces recuerdo una tarde hablando con mi bisabuela , qué en gloria este, me dijo – Luisito, tú que has viajado y visto mucho, ¿no te parece qué Alemania está muy lejos para que se vaya la hija de… - Mientras ella seguía hablando, me fije en un calendario de esos horteras que suelen regalar en los comercios de confianza y que salía un mapa de todo el mundo, me di cuenta qué Alemania estaba aquí al lado y qué yo no había visto nada de mundo, qué tenía que salir fuera de Europa.

No tardó mucho en llegarme la oportunidad, tuve que hacerme un viaje a Pekín para ¡UNA BODA! Ya qué tenía semejante compromiso, otro amigo y yo decidimos hacer un pequeño tour por China dejando Pekín para el final.

Fue llegar al aeropuerto de Hong Kong, montar en el metro, ver la ciudad por primera vez en mi vida y sentirme como Paco Martínez Soria en “ La ciudad no es para mí”, creo que solo me faltaba la boina bien enroscada y gallina en mano. Me enamore, aluciné y luego no hablemos de los parajes naturales de Yang Shuo (zona del sur de China).

Poco tiempo después en España recibí una oferta laboral de mi oficio, cocinero, tras meditarlo mucho (mentira no tuve nada qué meditar), acepte la propuesta (creo que incluso puse una pistola para que me hiciesen la propuesta XD) y me vine a vivir a la Conchinchina.

El blog decidí hacerlo para qué familia y amigos pudiesen seguir mis aventuras del día a día y para todo aquella o aquel, que le apetezca pasar un rato entretenido con mis anécdotas o le sirva para una futura guía de viaje.

Por último agradecer que hayas entrado en mi blog, te hayas divertido y qué si tienes alguna pregunta no dudes en consultarme, en todo lo que pueda ayudarte, te ayudare.